Dislalia Evolutiva
Es
aquella fase del desarrollo del lenguaje infantil en la que el niño no es capaz de repetir, por imitación,
las palabras que escucha, de formar correcta desde el punto
de vista fonético. No precisa un tratamiento directo, pues forma parte de un
proceso normal, aunque es necesario mantener con el niño un comportamiento
lingüístico adecuado que ayude a la maduración para evitar posteriores
problemas. En ocasiones estos niños les resulta más difícil lograr una
pronunciación correcta debido a la forma de hablar que pueden encontrar en su
familia o en el lugar donde vive.
Dislalia Funcional
Es la más frecuente y se caracteriza por
un mal funcionamiento de los órganos articulatorios. El niño desconoce o
realiza incorrectamente el punto y modo de articulación del fonema. No sabe
hacer vibrar la lengua para pronunciar bien la RR, y suele reemplazar la S por
la Z, o la E por la D.
Dislalia Orgánica
Hace que el niño tenga dificultades para articular determinados fonemas por problemas orgánicos. Se presenta en los niños cuando tienen alteraciones en las neuronas cerebrales, cuando tienen alguna malformación o anomalías en los órganos del aparato fonador.
Dislalia Audiógena
Se caracteriza por dificultades originadas por problemas auditivos. El niño se siente incapaz de pronunciar correctamente los fonemas porque no oye bien, en algunos casos, es necesario que los niños utilicen prótesis.
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